En el marco del fortalecimiento de la seguridad pública y la prevención de la violencia a nivel local, desde mediados del año 2018 el municipio de Chihuahua comenzó a trabajar en la implementación del modelo de “Justicia Cívica, Buen Gobierno y Cultura de la Legalidad”; esto con el apoyo y asistencia técnica de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a través del Programa Juntos para la Prevención de la Violencia (JPV) y el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (FORTASEG) del Gobierno de la República.
Con el liderazgo de la Dirección de Seguridad Pública (DSPM) del Municipio de Chihuahua, la finalidad del modelo de justicia cívica es contar con una ciudad más apegada a la cultura de la legalidad y con una sana convivencia social así como atender las causas que generan los conflictos y acercar a la comunidad a medios alternativos de solución de conflictos. En este marco, el Ayuntamiento de Chihuahua aprobó en septiembre de 2019 la creación del Reglamento de Justicia Cívica para el Municipio de Chihuahua, sustituyendo con esto al Bando de Policía y Buen Gobierno.
Desde el COPREV, a través de la Comisión de Seguimiento a Proyectos Especiales, contribuimos en fortalecer y gestionar la sostenibilidad del modelo de justicia cívica en el municipio de Chihuahua, a través de las siguientes acciones:
- Dando seguimiento mediante la realización de sesiones de trabajo y retroalimentación entre implementadores de sociedad civil, FICOSEC y gobierno municipal y la comunicación inmediata con al área de trabajo social en torno a los casos atendidos.
- Reforzamiento del marco jurídico del modelo de justicia cívica.
- Contribución en el fortalecimiento de los recursos humanos mediante el seguimiento a un programa de capacitación continua.
- La creación de herramientas y mejoramiento de los instrumentos para las evaluaciones psicosociales pre-post y el uso de herramientas biométricas.
- La elaboración y ejecución coordinada de un plan de comunicación en medios masivos y en el ámbito comunitario.
- La adecuación de los modelos de atención a personas usuarias e incidencia en la permanencia de las alianzas con sociedad civil organizada.
La implementación del nuevo modelo de Justicia Cívica a cargo de la DSPM se lleva a cabo con un importante factor de coordinación multisectorial, ya que participan también organizaciones de la sociedad civil como la Red de Cohesión y Participación Social 1,2,3 por mí y mi Comunidad y Ágape, además de FICOSEC, así como la sociedad en general. La Comisión de Seguimiento a Proyectos Especiales del COPREV ha fungido como una plataforma en la que concurren diferentes actores para el seguimiento y fortalecimiento del modelo.
¿Qué es Justicia Cívica?
La justicia cívica es un conjunto de procedimientos orientados a fomentar la cultura cívica y de la legalidad, y así poder resolver los problemas cotidianos de manera pronta, transparente y expedita.
Con justicia cívica:
– Se atienden los problemas desde su origen, pues se da seguimiento integral a cada caso y se evita la reincidencia en faltas administrativas.
– Los policías municipales están capacitados para atender, mediar y resolver in situ los conflictos entre ciudadanos.
– Se promueven mecanismos alternativos de atención a conflictos para facilitar la solución de problemas entre particulares.
– Se previene el escalamiento de la violencia.
– Se mejora la convivencia ciudadana.
– Se mejora la percepción del orden público y de la seguridad.
Así funciona en Chihuahua:
Tamizaje
Como parte del nuevo paradigma que propone la justicia cívica, que busca transitar de un modelo que privilegia el arresto, la multa y la amonestación por uno que atienda los orígenes del conflicto y los factores de riesgo, en Chihuahua se ha fomentado la mejoría a las herramientas que permitan cumplir con ello.
Entre dichas herramientas se encuentra la de tamizaje, que es una evaluación psicosocial aplicada a personas probables infractoras que permite que las personas juzgadoras cívicas en conjunto con el área de psicología las canalicen a alternativas como medidas de mejoramiento de la convivencia cotidiana. En Chihuahua se logró actualizar dicho instrumento permitiendo a las autoridades identificar un mayor número de factores de riesgo a la violencia en menor tiempo, haciendo posible una mejor canalización a los programas sociales que mejor les acomoden según los resultados.
Habiéndose realizado de la mano del programa Juntos para la Prevención de la Violencia de USAID, la herramienta elaborada con la participación de la DSPM, el COPREV y otras instancias y asociaciones locales será replicada en diversos municipios del país que se encuentran en sus propios procesos de implementación de justicia cívica.
